Cómo delegar el éxito con un equipo distribuido
Regla nº 1: no se puede supervisar todo. Confíe en su equipo. La delegación de tareas dentro de su equipo distribuido es un ejemplo clásico de cómo un directivo puede hacer un buen uso de la estructura jerárquica y obtener lo mejor de su equipo. No sólo puedes delegar tareas y proyectos, sino que también puedes asegurarte de que todo el mundo conoce y entiende el papel y las tareas que se le han asignado.
¿Por qué es tan difícil delegar?
Muchas personas experimentan un bloqueo mental cuando se trata de delegar y aún más cuando se trata de gestionar equipos distribuidos o virtuales. Tal vez sienta que nadie puede hacer el trabajo tan bien como usted. Tal vez sienta que no tiene tiempo para microgestionar a su equipo. O tal vez le resulte difícil que otra persona se lleve el mérito.
Pero pregúntese por qué ha creado un equipo distribuido en primer lugar. La mayoría de la gente lo hace para ahorrar dinero, ahorrar tiempo y aumentar la productividad. Sin embargo, si no se gestiona correctamente, el equipo que tanto tiempo ha dedicado a cultivar puede empezar a romperse, disolverse y, en última instancia, causar daños a su negocio y a su reputación.
Adopte un nuevo enfoque de la delegación
Si realmente quiere sacar el máximo partido a su equipo distribuido, es hora de olvidar cualquier recelo que tenga sobre la delegación y seguir algunas de las pautas que se indican a continuación.
El poder del 1:1
Aunque no esté en la misma oficina o zona horaria que sus empleados distribuidos, puede organizar reuniones individuales con ellos. Un 1:1 regular le ayudará a conocer a los miembros de su equipo de forma individual. Estas reuniones también pueden ayudar a establecer la confianza y también a averiguar dónde están los puntos fuertes y débiles de ese individuo. Establecer estos datos puede ayudarle a delegar eficazmente sus proyectos con confianza.
Tiempo de pista: el tuyo y el de ellos
El tiempo es esencial cuando se gestiona un equipo distribuido. Hay que asegurarse de no dedicar demasiado tiempo a la microgestión y de que el equipo trabaje de forma productiva y cumpla sus objetivos. Asignando tareas personalmente a los miembros de su equipo, estableciendo objetivos y supervisando activamente la forma en que manejan su tiempo, puede asegurarse de cumplir los plazos y de detectar los problemas a tiempo.
Un sistema de gestión del tiempo y una plataforma de software colaborativo pueden ayudarle a controlar el tiempo y también a asignar tareas y ayudar a sus equipos a trabajar en armonía, tanto si están todos en el mismo lugar como si están repartidos por todo el mundo.
Elija las tareas adecuadas para delegar
Es cierto que no todas las tareas pueden delegarse, pero las que pueden hacerlo deben tener las siguientes cualidades:
- Se puede desglosar en tareas rastreables
- Tiene un plazo establecido
- Completar la tarea ahorraría tiempo y mejoraría la productividad
- La tarea es una que beneficiaría a otra persona al aprender
Empezar con poco cuando se delega
Si le preocupa un poco ceder el control a los miembros de su equipo distribuido, empiece con algo pequeño. Elija tareas con un riesgo mínimo y un impacto bajo si las cosas van mal. Necesitas la delegación para que funcione a largo plazo y, si te ganas la confianza y haces que tu equipo sea autosuficiente para hacer el trabajo, puedes conseguir una confianza total en sus capacidades.
Cree un plan antes de delegar nada
Antes de delegar una tarea, asegúrese de conocer los plazos y los resultados. Piensa en las habilidades de cada miembro de tu equipo y asigna la tarea al miembro más adecuado.
Las reuniones también deben formar parte de su plan, ya sean en persona, por teléfono o por vídeo. La comunicación es muy importante a la hora de delegar tareas y proyectos.
La delegación podría ser la clave de su éxito
Al asignar las tareas correctas a su equipo distribuido, puede reducir la cantidad de tiempo que dedica a las tareas más pequeñas y empezar a centrarse en ser más proactivo, conseguir nuevos clientes o hacer crecer su negocio.