Recoge la oficina y vete a la nueva en un abrir y cerrar de ojos
Si trabajas en una empresa durante un periodo de tiempo, lo más probable es que te veas envuelto en una mudanza de oficina. Y muchas empresas exigirán a sus empleados que empaquen su propio cubículo u oficina, incluidos los objetos personales, el escritorio y el archivador. Utiliza estos consejos para preparar la mudanza y asegurarte de que tus cosas no se pierdan por el camino.
Pregunte al jefe
El primer paso que debes dar es averiguar si hay alguna restricción en cuanto a lo que se puede y no se puede llevar a la nueva oficina y si hay planes para el nuevo mobiliario. Si las hay, averigua el tamaño del escritorio y el espacio de los cajones. Asegúrate de conocer las normas antes de hacer las maletas.
Cómo recoger el archivador
Empieza a empaquetar con los documentos y las cosas del archivador. Ordene todo el desorden, que suele ser la tarea más grande y puede necesitar más tiempo que su escritorio. Decide, o averigua, qué documentos no necesitan estar ocupando espacio y, a continuación, recicla los que sí pueden hacerlo, así como destruye los documentos confidenciales que hayan cumplido su función.
Una vez que sepas lo que hay que llevarse, empieza a revisar todos y cada uno de los archivos y clasifícalos en montones específicos.
Una vez que hayas ordenado el montón de carpetas y archivos que te vas a llevar, mételos en una caja específica para archivos y ordénalos numérica o alfabéticamente. Utiliza una caja del tamaño adecuado: una demasiado grande hará que los archivos y las carpetas se muevan durante la mudanza y las cosas se confundan.
A continuación, marque cada caja de archivo con su nombre, departamento y nueva ubicación. Indique también si el contenido requiere una manipulación especial. Anote en el lateral de la caja su contenido e incluso un número para indicar el orden de desembalaje. Esto hará que el desembalaje sea mucho más fácil. Esto también es muy importante si estás en medio de un proyecto durante la mudanza.
Empaquetar el escritorio a continuación
Empieza por vaciar todos los cajones y clasificar los cuadernos, los clips y el resto del material. Quédate con lo esencial y considera la posibilidad de donar el resto a una organización benéfica. La idea es que sólo te lleves lo que necesitas.
Si tu jefe tiene una idea de cómo será el nuevo espacio y de su tamaño, así como de la cantidad de espacio que se puede acomodar, será más fácil decidir qué se queda exactamente y qué se va. Si tienes suministros y mobiliario extra, deja que tu jefe decida qué hacer con ellos.
Embalaje del equipo
Una vez más, pregunte a la persona encargada de la mudanza si necesita hacer una copia de seguridad de su propio ordenador y preparar otros equipos para la mudanza. Todo el equipo que te acompañe debe estar embalado de forma adecuada y segura. Así que empieza a reunir todo y pide ayuda al departamento de informática para trasladar tu ordenador de forma segura.
Ahora empaque los artículos personales
Lo principal que hay que tener en cuenta a la hora de empaquetar los objetos personales es el espacio exacto del que se va a disponer en la nueva oficina y cómo es la distribución. Los objetos personales, como los pósteres y los cuadros enmarcados, pueden no funcionar bien en la nueva oficina si no hay mucho espacio en las paredes.
En cuanto a la mudanza de las plantas, averigua primero si habrá una ventana en tu nuevo espacio de oficina y hacia dónde está orientada para saber si a la planta le gustará el nuevo espacio.
Es una buena idea llevarse todos sus objetos personales a casa, especialmente los de valor, para que no se pierdan en la mudanza. Si tienes que llevártelos, asegúrate de que tu empresa de mudanzas tenga un seguro que cubra los gastos de las obras de arte, por ejemplo, si se dañan.